LOS ÁNGELES, California.- El sueño de David Ortiz de tener un negocio exitoso se hizo realidad en tiempos de coronavirus, sin embargo, la pandemia que afecta a millones de personas ha hecho que su alegría tenga un sabor agridulce.
“Mi sueño eras empezar ese negocio que es Tacos Víctor con la concept y la sazón que tenían mis padres que iniciaron ellos en Oaxaca, México”, dijo David Ortiz, dueño de Tacos Víctor. Fue así como empezó su propio negocio que ahora opera de miércoles a domingo desde las 5 de la tarde en Pomona Sobre la avenida Garey.
Para lograrlo David Ortiz, trabajó por años en la construcción hasta que pudo ahorrar el dinero necesario para comprar su negocio, pero no la pudo establecer.
“La razón que no lo podía abrir es porque Pomona no daba el permiso, pero ahora de que empezó la pandemia es necesario comer afuera, por el Covid la gente tiene que alimentarse y consumir al aire libre”
Hace unas semanas con tres empleados por fin arrancó su negocio, pero el coronavirus en el proceso también le dio un duro golpe arrebatándole la vida primero de su hermano y, solo 20 días después, la de su padre.
“Es muy doloroso porque yo quisiera compartir logros y metas con mi papá y mi hermano para que ellos pudieran saber de lo que se está cumpliendo. Pero ellos no están aquí y es un dolor muy grande no poder compartirlo y pensar en el futuro en las metas que teníamos puestas y que ya no estan ellos para saborear y saber de esa victoria“
Aun así él no perdió su enfoque y la semana pasada se graduó como empresario de la cámara de comercio de Pomona.
“Ellos me educaron en las reglas y las leyes que se necesitan para abrir un negocio”, dijo Ortiz. Además afirma que una de las cosas más importantes que aprendió, fue el deber de cuidar a sus clientes, a sus empleados y cuidarse a sí mismo en esta disaster de salud.
“Es una prioridad lavarnos las manos, siempre usar a hand sanitizer y mantener nuestra área de trabajo limpia para que todo esté circulando correctamente como Well being Division lo pide”, aseguró Ortiz.
El mensaje que ahora quiere compartir con todos los soñadores como él, es el de arriesgarse a abrir su propio negocio y a los que están enfrentando el covid-19 a tener fe en Dios.
El dolor que le causó el coronavirus, también le ha servido de motor para continuar luchando por sus sueños, pues entre sus planes busca abrir dos camiones más el próximo año en Riverside y Los Ángeles.