El último trabajo como actor del director checo Jiri Menzel, fallecido la pasada semana, es este drama con toques de comedia que busca respuestas del pasado
El director checo Jiri Menzel, que ganó el Oscar a la mejor película extranjera en 1967 por ‘Trenes rigurosamente vigilados’, murió la pasada semana a los 82 años. Menzel rodó su última película en 2006, pero siempre mantuvo su actividad como actor. ‘Sin olvido’, que ganó siete premios de la Academia del cine eslovaco, incluido el de mejor película, le tiene como protagonista junto a Peter Simonischek, memorable en ‘Tony Erdmann’.
Menzel da vida en el filme de Martin Sulík a un intérprete octogenario, que viaja a Viena en busca del exoficial nazi que podría haber ejecutado a sus padres en Eslovaquia. Encuentra solo a su hijo, un jubilado vividor que se ha distanciado del pasado de su padre. Los dos hombres emprenderán un viaje a través de del país en busca de testigos supervivientes de la tragedia y descubrirán profundos conflictos no resueltos.
‘Sin olvido’ es un viaje a la memoria del Holocausto que no recuncia a algún momento de comedia. «¿Cuál es nuestra responsabilidad por lo que sucedió durante la guerra en nuestro país? ¿Por qué aceptamos las tendencias neofascistas en la sociedad?», se interroga el director.
