Puig lanza AI.LICE, una tecnología que permite conocer el olor de un perfume sin olerlo

En tiempos en que  el Covid-19 sigue circulando, una de las prioridades para las marcas y compañías es tranquilizar a sus clientes ofreciéndoles una experiencia de compra agradable implementando gestos barrera. En este contexto, el grupo catalán Puig (Carolina Herrera, Nina Ricci, L’Artisan Parfumeur…) acaba de presentar AI.LICE, una tecnología que permite conocer la composición olfativa de un fragrance sin necesidad de oler o tocar el frasco.

Al entrar en una tienda de perfumes, el cliente escanea un código QR con su smartphone. Una vez en el mostrador, cuando la cámara del teléfono inteligente enfoca la botella o el empaque de un aroma, AI.LICE indica la familia olfativa de la fragancia, así como sus ingredientes principales. Esta tecnología también comunica información sobre productos similares disponibles en la tienda que coinciden con las preferencias del cliente.

Para el lanzamiento de esta tecnología Puig ha creado la herramienta digital Magic Monocle, actualmente testada en tiendas asiáticas y británicas de Penhaligon’s, una de las marcas de perfumes de su portfolio. Esta herramienta permite a los consumidores explorar la oferta de perfumes de la marca creando una lista de productos para probar y comprar.

Mientras que Puig, que en 2019 generó una facturación de 2029 millones de euros, lanzó en 2018 Puig Futures, una plataforma destinada al desarrollo de tecnologías digitales e innovadoras para la industria del fragrance, la disaster sanitaria ciertamente ha acelerado el lanzamiento y la implementación de algunas de ellas.