MÉXICO.- Han pasado catorce años desde que Eva Norvind madre de Nailea Norvind falleció pero fue hasta ahora, que la actriz decidió emprender un épico viaje por carretera para traer con ella todas las pertenencias que la vedette dejó en los Estados Unidos. El emotivo trayecto lo hizo a bordo de un camión que ella misma manejó, desde Connecticut hasta Nuevo Laredo.
Eva Norvind fue una polémica estrella durante las décadas de los 70’s y 80’s, fungió como una conejita en «Playboy», period reconocida en el medio artístico como una sensual actriz, hizo una carrera como dominatrix, daba terapia sexual y hasta realizó películas pornográficas. Gran parte de su vida la hizo en México, sin embargo, debido a unos comentarios sobre los métodos anticonceptivos en televisión abierta tuvo que abandonar el país y se mudó a los Estados Unidos.
La famosa dominatrix, originaria de Noruega, falleció por ahogamiento en el año 2006 en una playa de Oaxaca. Desde entonces su hija Nailea Norvind decidió conservar muchas de las pertenencias de Eva Norvind, en una bodega en Connecticut en los Estados Unidos, pero ahora, catorce años después de la muerte de su madre, la actriz realizó un anecdótico viaje para recuperar gran parte de la herencia cultural que le dejó.
«Ahorita que no teníamos mucho qué hacer, consideré que period el momento perfecto para cerrar el ciclo. Me fui a Connecticut, donde ella vivía, renté un camioncito, metí todas las cosas ahí y me vine manejando desde ahí hasta Nuevo Laredo. Eran manejadas de catorce horas cada día, fue una gran aventura. Pensé que me iba a sentir como Lola la trailera pero se me olvidaba que traía un camión», comentó Nailea Norvind sobre su viaje.
La actriz Nailea Norvind comentó que está muy orgullosa de lo que hizo en vida su madre Eva Norvind porque ayudó a muchas personas: «Me vienen muchas memorias de experiencias con mi mamá de ciertos tiempos, incluso un gran sentimiento de admiración hacia ella por todo lo que aprendió, cuánto ayudó. De los libros que tenía ya hice una división que va a ser una herencia para mis dos hijas».